viernes, 23 de enero de 2015

El sector del transporte es el que más ha conseguido reducir sus emisiones de gases durante estos últimos años.

  Durante los útlimos cinco años, España ha conseguido reducir casi un 15% sus emisiones de gases con efecto invernadero según un reciente informe presentado por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Esta cifra está todavía por debajo de la de varios países de la Unión Europea, pero supone que las cosas se están haciendo adecuadamente. 
  En cuanto a la influencia de los distintos sectores económicos en esta reducción, es el del transporte y la logística el que ha experimentado el mayor descenso, que ha sido superior al 25% frente al resto de las actividades. Tradicionalmente mucho se había culpado a este sector de ser uno de los grandes culpables del daño medioambiental. 

  Según la Asociación de Transporte Internacional por Carretera (ASTIC) el descenso de las emisiones de gases se debe a diversos factores de distinto tipo: los combustibles empleados para los vehículos de transporte han avanzado tecnológicamente en los últimos años; también los motores y elementos de automoción se diseñan cada vez de modo más eficiente y consumen menos, reduciendo la emisión de gases a la atmósfera. 
  Asimismo, se han puesto en marcha nuevas infraestructuras de transporte: autovías, vías rápidas y mejoras generales del sistema de carreteras español, que permiten desplazarse en menos tiempo sin incrementar la velocidad máxima, permitiendo por tanto reducir emisiones.
  Incluso las propias empresas de tranporte por carretera han invertido en la compra de vehículos más eficientes, en sisitemas de optimización de la gestión de flotas para reducir los km realizados en vacío y en formación del personal para mejorar el modo de conducción.

  Es indudable que por su propia naturaleza este sector produce unos impactos sobre el entorno y el medio ambiente, pero también es cierto que las empresas implicadas en el sector del transporte están haciendo todo lo que está de su mano para colaborar en que se reduzcan en lo posible, y por ello es lógico que reclamen que no se les penalice subiendo los impuestos indirectos asociados a las emisiones de CO2.
  Hay que pensar que éste es un sector  estratégico en la economía española que transporta más de un 85% de las mercancías de nuestro país, favoreciendo y colaborando con el desarrollo general de la economía y el comercio.

(Artículo extractado del publicado por Ramón Valdivia, director General de Astic, y publicado en El Economista)






CÁRCABA GRUPO
Tfno. 985 25 26 22
www.carcaba.es